10 pintoras que todas las niñas y niños deben conocer (parte 1)


Comienzo con diez pintoras una saga de mujeres artistas que debemos conocer. Porque la educación es la mejor herramienta de cambio y la historia del arte necesita cambiar. 
Los grandes pintores de todas las épocas forman parte de la cultura y el imaginario popular, pero ¿sólo los hombres fueron grandes pintores? ¿sólo los hombres europeos? Por supuesto que no. Siempre ha habido grandísimas pintoras en todo el mundo pero la injusta historia del arte no las ha reconocido a pesar de sus increíbles esfuerzos por poder encontrar un lugar en un mundo que también era muy injusto. Os invito a conocer a estas pintoras y reconocerles su lugar junto a Monet, Kandinsky o Pollock. 

1. Berthe Morisot: (1841 - 1895)


Seguro que conoces a muchos pintores impresionistas, incluso aunque no te guste el arte probablemente puedas nombrar unos cuantos. ¿Alguno de esos nombres pertenece a alguna mujer? Me atrevo a asegurar que no. Sin embargo Morisot fue una talentosa pintora impresionista reconocida en su época y perteneciente al grupo de pintores que sí conoces, como Monet, Manet, Renoir o Cezanne. Sin embargo la historia del arte la ha arrinconado en el olvido.

Recursos: 
-Libro infantil ilustrado: «Pintoras, grandes artistas que se pintaron muy bien», de Ángeles Caso, ilustrado por Laura López.


2. Hilma af Klint: (1862 - 1944)

Durante muchos años se guardaron en un almacén 1200 cuadros, 26000 páginas de notas y otros tantos escritos. Af Klint había tomado la decisión de que algunas de sus pinturas se almacenaran durante 20 años después de su muerte, el mundo no estaba preparado para verlas y entenderlas.

En 1906 Af Klint ya realizaba pinturas abstractas, sin embargo no empezaron a conocerse hasta 80 años después, a partir de 1986. Mas de 1000 cuadros abstractos pintados antes de que existiera el arte abstracto. Antes de Kandinsky, Mondrian o Malevich. Imaginaros la situación, conocer que una pintora rompió con la figuración mucho antes que los considerados y alabados como pioneros de la abstracción. Claramente algo difícil de aceptar para la historia del arte.
Foto extraída de Wikimedia Commons

Af Klint estudió en la Real Academia Sueca de las Artes de Estocolmo, en la que se graduó con honores y durante décadas pintó, expuso y vendió retratos y paisajes de estilo naturalista. Pintó plantas y animales con gran detalle.

Tras la muerte de su hermana de 10 años se interesó cada vez más por el espiritismo y el más allá, algo que influenció también su pintura. Empezó a experimentar para poder llevar a sus cuadros sus inquietudes espirituales. Sus pinturas comenzaron a llenarse de exploraciones de color y formas, estudios orgánicos de objetos, ciencias y matemáticas, inquietudes espirituales... 

Al igual que Kandinsky, se involucró en filosofías y prácticas de ocultismo, espiritismo, la teosofía fundada por Helena Blavatsky o la antroposofía de Rudolf Steiner. Ambos pintores se alejaron de la imitación de la naturaleza para expresar sus mundos interiores. Af Klint empezó a utilizar formatos gigantescos, cromatismo intenso, y multitud de signos.
Formó el grupo Las Cinco con otras pintoras y realizaron sesiones espiritistas (que aunque hoy nos parezca excéntrico era algo habitual en esa época) en las que pintaban abandonando el lenguaje figurativo. Pintaban en estado de trance, un antecedente de lo que harían más tarde los surrealistas como escritura automática. En sus cuadernos Af Klint escribiría que en esas sesiones entraban en contacto con seres superiores.

Foto extraída de Wikimedia Commons

Le pareció (y acertadamente ¿no crees?) que todo esto no sería ni bien visto ni comprendido en su época, por lo que mantenía sus experimentaciones artísticas de manera secreta y continuaba pintando paisajes de cara a la galería. Lo mismo pensó al hacer el testamento, por eso pidió a su sobrino que almacenase su obra hasta al menos 20 años después de su muerte. 

Aunque ya se han realizado varias exposiciones suyas y comienza a reconocerse su nombre cada vez más, desde luego aún no está en el lugar que merece en la historia del arte, ni en los manuales, museos o divulgaciones.


3. Sonia Delaunay: (1885 - 1979)




Delaunay no pintaba las cosas, los lugares o la gente tal y como aparecían en la vida real, eso no le interesaba. En su lugar prefirió capturar los colores, formas, sonidos y movimientos del mundo a su alrededor, usando como forma de expresión el arte abstracto. Experimentó tanto con los colores y la disolución de las formas que, junto a su marido Robert, crearon el término "simultaneísmo" para referirse a los contrastes de color de sus composiciones a partir de los efectos que unos colores tienen sobre otros.

Coincidiendo con el nacimiento de su hijo Charles, Sonia creó su primera obra abstracta, una colcha de patchwork para la cuna de su hijo. Hecho con retales de ropa que combinaban una serie de colores contrastados. Robert identificaba la colcha con el arte popular ruso, pero los amigos de la familia e integrantes del círculo artístico que los rodeaba no dudaron a la hora de reconocer los principios del cubismo que recogía la obra textil y destacar la combinación de colores únicos que había realizado Sonia.
Chadwick, Whitney. Los otros importantes. Creatividad y relaciones íntimas. Madrid: Cátedra, 1994, p. 44



Además de pinturas también realizaba ilustraciones, collage y encuadernaciones. Diseñó portadas de revistas y carteles publicitarios. Realizó multitud de objetos de decoración y diseñaba ropa, desde los trajes que lucían ella y Robert hasta el vestuario del ballet ruso de Cleopatra y la ópera Aida. Creó sus propias boutiques de moda, para las que diseñaba vestidos y complementos. De hecho se consideraba más diseñadora que pintora y desarrolló sus estudios sobre el color y sus ideas de simultaneidad a través de  gran variedad de técnicas y en una multitud de materiales, desde sus pinturas a telas, cerámicas, tapas de libros, mosaicos, abanicos, puertas, alfombras... Una idea muy interesante que Delaunay desarrolló fue los "trajes poema", vestidos que diseñaba en colaboración con amigos poetas como Tristan Tzara.

Vivió 94 años y durante toda su vida continuó con sus investigaciones sobre los contrastes de color. No la podemos considerar exclusivamente una pintora, sino una artista total. Ella misma dijo al final de su vida que si el arte está dentro de ti, está en todas partes.



Recursos: 
-Libro infantil ilustrado: Una vida de color (A life of color), escrito por Cara Manes del departamento de pintura y escultura del Museo de Arte Moderno de Nueva York.

- Libro infantil ilustrado: Alfabeto (los cuentos de la cometa). Letras del alfabeto ilustradas por Sonia Delaunay acompañadas de canciones populares infantiles. 

-Libro infantil ilustrado pop-up: Madame Sonia Delaunay (inglés), de Monaco Gérard Lo.




4. Tarsila do Amaral (1886 - 1973)


Foto realizada en la exposición del MOMA sobre Do Amaral, 2018

Do Amaral creció en una familia adinerada de Sao Paulo que le permitió de forma privilegiada poder estudiar escultura, dibujo y pintura. En un principio realizaba retratos, estudios de animales y bodegones. Sin embargo cuando viaja a París su obra se vio influenciada por el cubismo y otras vanguardias. Entonces su pintura comienza a incorporar y reunir las nuevas formas de expresión con sus intereses sobre la cultura afrobrasileña, orientándose cada vez más hacia el primitivismo. 

Interesada en plasmar la riqueza natural y cultural de su país a través de sus modernas influencias Tarsila do Amaral se acaba convirtiendo en la pintora más representativa del movimiento modernista brasileño:

Se busca lo moderno, original y polémico, al tiempo que se busca la identidad de Brasil en sus orígenes y se revaloriza al indio como verdaderamente brasileño. Es un movimiento profundamente nacionalista, que busca también afirmarse en el aspecto lingüístico, diferenciando la "lengua brasileña", hablada por la gente de la calle, de la lengua portuguesa. /Wikipedia

Foto realizada en la exposición del MOMA sobre Do Amaral, 2018

Sus pinturas son coloridas, vibrantes y sinuosas. Sus temas, colores brillantes y formas primitivistas junto a paisajes tropicales de exuberante vegetación son muy reconocibles. Al igual que Kahlo, se ha convertido en un icono popular cuya vida y obra ha aparecido en series y películas.


5. Georgia O'Keffe: (1887 - 1986)




O' Keffe se formó en Chicago y Nueva York. Trabajó como ilustradora y maestra de arte en primaria. Su interés por los detalles, la fotografía y la combinación de influencias vanguardistas desarrolló una obra particular repleta de simbolismo.

No copio las cosas enteras, sino fragmentos, porque pinto lo que me parece importante o me hace sentir emociones dentro del todo.



Foto realizada en el Museo Metropolitano de Nueva York